Cientos de lazos poblaron el ‘Día de San Valentín’ nuestra iglesia en una jornada en la que el amor fue el protagonista. Después de un fin de semana de fiesta en el que reunimos a decenas de niños y niñas bautizados, el jueves de San Valentín oficiamos misas cada hora para reforzar los lazos de los que se quieren.
A las siete de la tarde tuvimos nuestra Misa Mayor en la que estuvimos acompañados por el grupo Alborada que como siempre estuve magnífico. Las parejas escribieron en los lazos sus nombres, poco después de que el padre Angel les bendijera. Igualmente pusieron sus nombres padre e hijos y amigos y amigas. La única condición para colocar una cinta es querer a alguien o dejar quererse.